Oliver Mintzlaff, director ejecutivo de Red Bull Racing, ha enviado un mensaje contundente ante las dudas generadas por el irregular inicio de temporada del equipo. “El juicio final se hará al final”, declaró Mintzlaff a los medios, dejando claro que consideran prematuro cualquier pronóstico sobre su desempeño en el campeonato. Aunque Max Verstappen se mantiene como serio aspirante al título de pilotos -actualmente segundo a doce puntos de Oscar Piastri-, la escudería austriaca enfrenta un desafío mayúsculo en el campeonato de constructores, donde acumula un déficit de 99 puntos frente a McLaren.
El directivo reconoció que los resultados no cumplen con las expectativas del equipo, especialmente tras el decepcionante sexto puesto de Verstappen en el Gran Premio de Bahréin, que provocó una reunión de crisis interna. Sin embargo, Mintzlaff fue enfático al descartar cualquier reacción precipitada: “Estamos insatisfechos, pero cuestionarlo todo ahora sería accionismo, y el accionismo nunca ha conseguido nada en el deporte”.
Las declaraciones del ex piloto y ahora analista Ralf Schumacher, quien sugirió que Verstappen podría abandonar Red Bull en 2026, fueron abordadas con calma por Mintzlaff. “Tengo una buena relación con Ralf. Él hace su trabajo y nosotros el nuestro. Nadie en Red Bull está perdiendo el sueño por sus declaraciones”, afirmó el ejecutivo alemán. Esta postura refleja la confianza interna en mantener a su piloto estrella, pese al interés de otros equipos.
Mintzlaff hizo hincapié en la necesidad de perspectiva en una temporada que consta de 24 carreras. “Solo hemos completado cinco Grandes Premios. Nada está perdido ni mucho menos. Quien dé por descartado a Red Bull en esta lucha por el título se equivoca”, sentenció. El directivo recordó además el reciente historial de éxito del equipo, que en los últimos cuatro años ha dominado la categoría con seis títulos mundiales.
El máximo representante de Red Bull Racing estableció un paralelismo con el fútbol para explicar la situación actual. “Algunos creen que puedes caminar sobre el agua cuando ganas cuatro o cinco partidos seguidos, pero cuando pierdes esa misma cantidad, todo se pone en duda. Nosotros no caeremos en esos extremos”, aseguró Mintzlaff.
Esta analogía subraya la filosofía del equipo, que prefiere mantener la calma y trabajar en soluciones antes que reaccionar de forma impulsiva. Con una de las temporadas más largas de la historia por delante y con Verstappen aún muy cerca en la clasificación individual, Red Bull confía en que su capacidad de desarrollo les permitirá volver a la senda del éxito. La pregunta ahora es si podrán revertir la tendencia y mantener viva su aspiración al título de constructores, algo que sin duda marcaría un hito en su historia en la Fórmula 1.
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