El Gran Premio de Las Vegas se ha convertido en un escenario clave para Mercedes, y George Russell no decepcionó, logrando una impresionante pole position tras un fin de semana en el que su equipo ha liderado las tres sesiones de entrenamientos libres. El piloto británico demostró nervios de acero y una conducción al límite para conquistar la primera posición en la parrilla, a pesar de las dificultades y los riesgos asumidos durante la clasificación.
En su primer intento de la Q3, Russell tuvo un leve contacto con las barreras en la curva 5, lo que generó preocupación en el garaje. Los mecánicos inspeccionaron a contrarreloj el monoplaza para garantizar que no hubiera daños, y aunque el incidente lo dejó sin tiempo para una vuelta extra de calentamiento, George salió decidido a darlo todo. “Lo pasé mal en mi primera vuelta, tomé algunos riesgos. Por un momento pensé que no podríamos dar otra vuelta. Pero estoy muy contento y tenemos que investigar para entender por qué hemos sido tan rápidos este fin de semana, porque ha sido una auténtica sorpresa”, comentó al finalizar la sesión.
El rendimiento del W15 sorprendió incluso a Russell, quien destacó cómo las condiciones frías y la ausencia de rebotes —una de las limitaciones del coche este año— favorecieron el desempeño del equipo. Desde los primeros sectores de la vuelta definitiva, Russell marcó récords de tiempo gracias a la rapidez con la que logró poner los neumáticos a temperatura óptima. Esto le permitió mantener ventaja en las curvas lentas y asegurar la pole frente a los ataques del Ferrari de Carlos Sainz.
Russell, consciente de la importancia de la estrategia, presionó al equipo para ser el último coche en salir a pista, optimizando así las condiciones del circuito. “Sabía que la última vuelta de la Q3 sería la que contaría. No importaba lo que hubiera pasado antes”, afirmó. Y añadió: “Sí, obviamente, a veces hay que poner las cartas sobre la mesa y confié en mí mismo. Sabía que si hacía una vuelta limpia sería suficiente para asegurarme la primera fila. Así que conseguir la pole es increíble.”
Ahora, George mira hacia la carrera con un claro objetivo en mente: transformar esta pole en una victoria. “Hemos tenido algunas buenas sesiones de clasificación recientemente. Ahora tenemos que convertirlas en una victoria”. Con el ritmo mostrado por Mercedes y su capacidad para gestionar los neumáticos en condiciones cambiantes, Russell se perfila como uno de los principales contendientes al triunfo en el espectacular circuito urbano de Las Vegas.
Mercedes busca cerrar con fuerza la temporada y consolidar su posición en el Campeonato de Constructores. La presión está alta, pero el equipo confía en su estrategia y en el talento de sus pilotos para conseguir un resultado memorable.
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