¡Bienvenidos a TotalMotor, tu fuente confiable de noticias del mundo motor! Esta semana marca un momento crucial para Yamaha en MotoGP: el fabricante japonés está listo para poner a prueba su tan esperado motor V4, en un ensayo privado que se llevará a cabo este martes y miércoles en el Circuito Ricardo Tormo de Valencia.
Esta nueva configuración de propulsor —una de las más radicales en la historia reciente de Yamaha— se viene desarrollando desde hace varios meses como respuesta a la evidente desventaja en velocidad punta de la M1 frente a las potentes Ducati. Yamaha es actualmente el único fabricante de la parrilla que sigue utilizando un motor de cuatro cilindros en línea. Pero la presión de sus propios pilotos y la necesidad de competir al más alto nivel han impulsado este cambio estratégico.
Aunque la normativa y las concesiones actuales permiten que los pilotos oficiales Fabio Quartararo y Alex Rins puedan participar del test, será Augusto Fernández quien lidere las pruebas. El piloto mallorquín, actual probador y reserva de Yamaha, ha estado activo recientemente como reemplazo de Miguel Oliveira en las rondas de Austin y Qatar. Tras su regreso desde Doha, ya se encuentra en Valencia listo para poner a prueba este revolucionario motor. También se espera la presencia de Cal Crutchlow, parte esencial del equipo de desarrollo de Yamaha.
Originalmente, Yamaha había contratado a Andrea Dovizioso para este rol, pero una desafortunada caída doméstica —justo después de la extracción quirúrgica de una placa en la clavícula— lo dejó fuera de combate. A pesar de estos contratiempos, la marca sigue adelante con el test en suelo europeo, después de una primera prueba muy básica realizada en Sepang a principios de año, donde aún quedaba mucho por afinar, sobre todo a nivel electrónico.
La elección de Valencia como escenario no fue casual. Inicialmente, el trazado de Jerez estaba en los planes, pero las inundaciones recientes lo dejaron fuera de condiciones. Además, la normativa de MotoGP impide realizar test en un circuito 14 días antes de una carrera oficial, lo que dejó como mejor opción al Ricardo Tormo. Este test también marca la primera aparición de prototipos de MotoGP en el trazado valenciano tras las intensas lluvias.
Este desarrollo de Yamaha no sería posible sin el apoyo técnico de Marmotors, la empresa de ingeniería de Luca Marmorini, figura destacada en el desarrollo de motores en la Fórmula 1. El objetivo final es claro: recuperar terreno en la lucha por el campeonato y dotar a la M1 de una unidad de potencia más competitiva que permita pelear de tú a tú con las Ducati, KTM y Aprilia.
El motor V4, que se está desarrollando con la vista puesta en 2027 —cuando se introduzca el reglamento técnico de los 850cc—, ha recibido luz verde para avanzar, a pesar de la congelación actual de motores establecida por la MSMA hasta finales de 2026. El test de esta semana será crucial para decidir si el proyecto sigue adelante con fuerza o si aún requiere más tiempo en los bancos de pruebas.
“Cuando la moto con el motor V4 sea mejor que la que usamos ahora, si es que llega a serlo, entonces la introduciremos. No es realista pensar en hacer el cambio en 2025. Cuando les demos esa moto a los pilotos oficiales tenemos que estar convencidos de que está a un buen nivel”, explicó Paolo Pavesio, director de Yamaha, en declaraciones a Motorsport.com en febrero.
Con este nuevo impulso técnico, Yamaha busca redefinir su rumbo y volver a ser protagonista en la cima del motociclismo mundial. En TotalMotor seguiremos cada paso de este desarrollo exclusivo, porque el rugir de los motores… también se siente con información.
¡Nos vemos en pista, motorheads!
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